1 DE ABRIL DE 2009: BENDICION DEL CRISTO REY DE LA PAZ EN ACAPULCO.

1 DE ABRIL DE 2009: BENDICION DEL CRISTO REY DE LA PAZ EN ACAPULCO.

Pbro. Juan Carlos Flores Rivas.

Llegó la cita, el Miércoles de la V Semana de Cuaresma, 1 de abril de 2009, bajo un radiante sol, pero increíblemente fresco por la altura de 640 metros sobre el nivel del mar, una multitud de casi mil personas subieron al cerro de El Encinal para la Solemne Celebración de la Santa Misa y la bendición de la escultura del Cristo Rey de la Paz en Acapulco.

Desde las siete de la mañana comenzaron a subir los fieles desde diversos puntos de la ciudad y puerto de Acapulco a la explanada de Cristo Rey en el encinal, de el Ejido de Carabalí, y en medio de un gran júbilo compartieron el pan y la sal bajo los árboles de ese íncreible lugar de Acapulco.

Cerca de las diez de la mañana llegó al lugar el Señor Arzobispo de Acapulco Monseñor Felipe Aguirre Franco, y presidió la Santa Misa, concelebraron Monseñor Silvino Moreno Rendón -que no cabía de júbilo-, el Pbro. José Jesús Mendoza Zaragoza -Párroco de San Nicolás de Bari en la Colonia La Laja-, y su Vicario Parroquial el Pbro. Harvey Morales Victorino, el Pbro. Rafael Galván Cárdenas -Párroco de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en la colonia Bocamar, y u servidor Juan carlos Flores Rivas.

Una ceremonia emotiva, los fieles con gran fervor, acompañó la Misa el coro de la Comunidad del Camino Neocatecumenal de la Parroquia de San Felipe de Jesús. En la homilía el Señor Arzobispo recalcó la importancia de Cristo en la construcción de la paz en nuestra sociedad, pues Cristo "ubicado entre el cielo y la tierra"... "al ser levantado"... "atrae a todos hacia Él"... "si aún no ha enviado el Padre sobre nosotros un cataclismo... es por su intermedio misericordioso"...

Al final de la Santa Misa, el Señor Arzobispo procedió a la bendición de la escultura -que por motivos económicos no pudo ser colocada en tiempo y forma en el lugar definitivo- así como la plataforma donde será colocado, y el mirador desde donde se aprecia la espléndida bahía de Santa Lucía.

El júbilo desbordó a todos los participantes, el Canimo Neocatecumenal danzó en la explanada, y todos, al final, compartieron los alimentos, y nadie quería dejar ese magnifico Tabor acapulqueño, más de uno quería "hacer tres chozas".

Con la ayuda de Dios, y la colaboración económica de todos, en estos días el Cristo Rey de la PAz será colocado en su lugar definitivo.

¡VIVA CRISTO REY EN ACAPULCO! ¡VIVA SANTA MARIA DE GUADALUPE!